A la hora de dormir, para lograr un buen descanso, la elección de la almohada correcta es tanto o más importante que el colchón que se está utilizando. Hay gran variedad de tipos y tamaños.
Lo importante es determinar según la anatomía corporal, en especial en la zona de hombros, cuello y cabeza como así también el uso y costumbre al recostar el cuello y cabeza sobre la misma.
Ejemplo: algunos acostumbran dormir de lado, por lo que es necesario cubrir todo el espacio resultante en el ángulo generado entre hombro y cabeza siempre pretendiendo que el mismo sea un ángulo de 90 grados.
Si en cambio acostumbramos a dormir boca arriba de espaldas en la cama, lo recomendable sería una almohada no muy alta o anatómica (preferentemente de espuma viscoelástica) que permita el buen reposo sin exagerar en alto final de posición de cabeza respecto al cuerpo que en ningún momento debería superar un ángulo de 25 grados respecto la espalda.
Por último hay quienes prefieren dormir boca abajo para lo cual de ser necesario, se recomienda usar una almohada lo más baja en altura posible.
Conclusiones: lo recomendable es tener un mínimo de tres almohadas distintas para el uso diario, siempre a mano en nuestras camas para lograr el máximo confort según la posición deseada en el momento del descanso.
¿CÓMO ELEGIR TU ALMOHADA?
A la hora de dormir, para lograr un buen descanso, la elección de la almohada correcta es tanto o más importante que el colchón que se está utilizando. Hay gran variedad de tipos y tamaños.
Lo importante es determinar según la anatomía corporal, en especial en la zona de hombros, cuello y cabeza como así también el uso y costumbre al recostar el cuello y cabeza sobre la misma.
Ejemplo: algunos acostumbran dormir de lado, por lo que es necesario cubrir todo el espacio resultante en el ángulo generado entre hombro y cabeza siempre pretendiendo que el mismo sea un ángulo de 90 grados.
Si en cambio acostumbramos a dormir boca arriba de espaldas en la cama, lo recomendable sería una almohada no muy alta o anatómica (preferentemente de espuma viscoelástica) que permita el buen reposo sin exagerar en alto final de posición de cabeza respecto al cuerpo que en ningún momento debería superar un ángulo de 25 grados respecto la espalda.
Por último hay quienes prefieren dormir boca abajo para lo cual de ser necesario, se recomienda usar una almohada lo más baja en altura posible.
Conclusiones: lo recomendable es tener un mínimo de tres almohadas distintas para el uso diario, siempre a mano en nuestras camas para lograr el máximo confort según la posición deseada en el momento del descanso.